Sacerdotes de Atacama acompañan al Padre Juan Barraza de Caldera en misa por 25 años de sacerdocio
La comunidad católica de diversas parte de la región llegaron hasta la Iglesia San Vicente de Paul de la comuna de Caldera para estar presente en la misa para celebrar los 25 años de sacerdocio del Padre Juan Barraza Maldonado, también estuvieron presentes el administrador diocesano de Copiapó Padre Jaime Pizarro junto a sacerdotes de diversas iglesias de Atacama en una tarde cargada de emociones
El Padre Juan Barraza, ha sido sacerdote de las iglesias de Diego de Almagro, Vallenar y Caldera, a esta comuna llegó hace 11 años, ganándose el cariño de toda una comuna y por todo el bien hecho como sacerdote en las vidas de las familias que son atendidas gracias a esta vocación y donde el Señor lo ha llamado para hacerlo presente, en su misericordia, en su cuerpo y en su sangre, hacerlo presente sobre todo en el sacramento de la reconciliación.
El Padre Juan Barraza, Cura Presbítero de Caldera, indicó “Muy feliz porque no es a mí este homenaje sino a Jesús, es el que va haciendo la obra en uno y ojala seamos fieles a eso por siempre. En estos 25 años de sacerdocio he querido ser fiel a estos tres amores que aprendí en la iglesia como es el amor a Jesús, el amor a su iglesia y el amor a los más pobres, ojala todos me ayuden a seguir haciendo fiel a estos tres amores de mi vida. Son once años que llevo en Caldera y he tratado de vivir muy sencillamente, sirviendo y amando a este pueblo que el Señor me envió para estar presente”.
Por su parte, el administrador diocesano, Padre Jaime Pizarro, comentó “Ha sido una misa muy bonita con mucha alegría y de mucha participación de la gente que se ha expresado o que ha dado sus acciones de gracias y nosotros los curas también hemos venido con la mayoría para acompañar al Padre Juan y agradecer a Dios sus 25 años como sacerdote, un muy buen cura y cercano a toda la gente con mucha fraternidad, además de ayudarnos a pensar más profundamente de lo que uno normalmente repite, el Padre Juan nos ayuda mucho a reflexionar, especialmente en lo social y humano”.
Luego de esta hermosa celebración, se les invitó a todos los asistentes a compartir un una exquisitas onces en compañía de sopaipillas, para seguir festejando en torno a la otra mesa, la mesa festiva. Uno de los proyectos importantes del Padre Juan, es la construcción de la Capilla de nuestra Señora de Guadalupe que ya lleva un gran porcentaje de construcción y que va a quedar ubicada en el sector poblacional de Villa Las Playas.
Iris Chepillo, integrante de la comunidad católica de Caldera, expresó “Un servicio en donde el Padre Juan generosamente ha prestado a la comunidad calderina para los más pobres, un servicio que siempre ha sido por la línea social, un hombre que ha estado en todas con el pueblo y como dice el “el prestar servicio es humano”, yo creo que es eso lo que necesitamos, queremos personas cercanas, gente que nos pueda acompañar, que nos pueda orientar, o también nosotros como católicos cuando nos equivocamos y tenemos que caminar y aprender a levantarnos y en esa acogida el pueda estar ahí con nosotros”.
