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La Masonería está de Fiesta: La Respetable Logia “Orden y Libertad” N° 3 Cumple 158 años de fructífera labor masónica

*“Cada vez que celebramos un acontecimiento como el de hoy, evocamos las tradiciones para respetarlas; pero nuestros pasos deben ser guiados hacia la renovación que impone el tiempo y los cambios de los acontecimientos sociales.

Las tradiciones nos ayudan a meditar, ellas son las que nos hacen deducir y cavilar y unen la sabiduría del pasado y la inquietud del presente, orientando el porvenir”. Hugo Garrido Gaete, ex Venerable Maestro.


La Masonería es una asociación universal, filosófica y progresiva, que procura inculcar a sus afiliados el amor a la verdad, el estudio de la moral universal, de las ciencias y de las artes, desarrollar en el corazón humano los sentimientos de abnegación y caridad, la tolerancia religiosa, los deberes a la familia, tiende a extinguir los odios de raza, los antagonismos de nacionalidad, de opiniones, de creencias y de intereses, uniendo a todos los hombres por los lazos de la solidaridad, confundiéndolos en un sincero afecto de mutua correspondencia. Procura con sus doctrinas filosóficas mejorar la condición del hombre por todos los medios lícitos a su alcance y especialmente por la instrucción, el trabajo y la beneficencia, siendo el origen y el verdadero lema de la Masonería… (Mac Key).

Referirse a la Masonería, se hace imposible si no se refiere paralelamente a la historia. Lo anterior, debido a que las acciones de la masonería inciden de manera notable en los respectivos contextos sociales.

Eso es lo que sucede con la obra y la historia de la Respetable Logia “Orden y Libertad” N° 3, que hoy 11 de enero conmemora su Centésimo Quincuagésimo Octavo Aniversario, con una fructífera labor en Copiapó, la Región de Atacama y el país en general.

De acuerdo a lo señalado por el doctor Armando Ossa Ossa, en su obra denominada “Cuadernos Simbólicos de la Gran Logia de Chile”, quien además fue miembro de esta Logia; “Orden y Libertad” abrió sus puertas el 11 de enero de 1862, según documentos históricos, en los cuales basa su trabajo.

A partir de esta fecha, explica Ossa, existirían archivos y documentos que respaldan el trabajo y acciones que permitieron dar vida esta logia en el norte de Chile.

ORDEN Y LIBERTAD

En este marco de un naciente movimiento intelectual, filosófico y laico en nuestro país, de acuerdo a los antecedentes recopilados en la obra de Ossa y expuestos por Garrido, llegamos a 1862, en que, dirigidos por Javier Mariátegui, se acordó constituir en Copiapó “Orden y libertad”.
Conforme a los historiadores y documentos del siglo XIX, es posible sostener que las provincias del Norte eran más proclives a las ideas liberales que el centro del territorio, donde se concentraba el conservadurismo, razón por la cual la Masonería chilena nace con fuerza en estas zonas.

Las Logias fueron fundadas e instaladas por extranjeros quienes visitaban constantemente las provincias, Valparaíso, Concepción y Copiapó, para trabajar en el comercio y en la industria minera, razón esta última que explica que los primeros talleres fueran constituidos solamente por extranjeros que incluso trabajaban en sus idiomas de origen como el francés y el inglés.

Esta era la situación del país y el devenir social, en especial en Copiapó y es en este ambiente a pocos días posteriores del Solsticio de Verano, precisamente el día 11 de enero de 1862, se levantan las Columnas de “Orden y Libertad”, la tercera Logia de habla hispana en Chile, Logia Madre de Madres Logias y de la Gran Logia de Chile.

Es en esta fecha cuando un grupo de masones extranjeros en Copiapó, reunidos en una Tenida informal, dirigidos por Francisco Javier Mariátegui, de origen peruano; acordaron y se comprometieron, según documento a modo de acta, a crear una Logia, para lo cual dejaron la siguiente constancia: En el Oriente de Copiapó, a los once días del mes de enero de 1862, era vulgar, 5862 era masónica, reunidos los hermanos que al margen se expresan, con el objeto de discutir y arreglar el establecimiento de una logia simbólica, para perfeccionar y llevar adelante los trabajos del arte real, practicando las virtudes de los antiguos y libres francmasones y contribuir a la reforma y mejora de la especie humana.

Después de una seria y detenida discusión, resolvieron por unanimidad levantar columnas de un nuevo Taller con el nombre “Orden y Libertad”.

Como segundo punto, dejan por escrito a modo de acuerdo, que trabajarán en el idioma castellano, adoptando el rito Escocés Antiguo y Aceptado y pedir carta instaladora al Gran Oriente de Francia.

LA LOGIA Y SUS OBRAS

Referirse a la nutrida historia y obras de Orden y Libertad, en pro de una mejor sociedad bajo la perspectiva de los valores propios de la masonería, como son la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad, demandaría otro enfoque y análisis de lo alcanzado por este taller. No obstante, a modo de referencia, es importante mencionar la materialidad de alguna de sus obras y así connotar el aporte de ello y la trascendencia en su debido contexto o tiempo, para bien de la comunidad toda.

He aquí, parte de lo desarrollado:

TALLERES Y LOGIAS FORMADOS
POR ORDEN Y LIBERTAD:

*R:.L:. Justicia y Libertad N° 5 del Valle de Santiago
*R:.L:. Luz y Esperanza N° 11 del Valle de La Serena.
*R:.L:. Fraternidad Copiapó N° 129 del Valle de Santiago.
*Triangulo Luz y Patria N° 37 sobre el cual se fundó la R:.L:. Igualdad N° 88 del Valle de Vallenar.
*R:.L:. Rafael J. Valdés N° 65 del Valle de Chañaral, actualmente con el N° 165 en el Valle de El Salvador.
*R:.L:. Atacama N° 164 del Valle de Copiapó.
*Triangulo Luis Alberto Zapata Rojas, desde donde nació la R:.L:. Cadena Fraternal Caldera N° 218.

LA OBRA

Sociedad de Auxilios Mutuos “Fraternidad de Atacama”, que fue la precursora de la Sociedad de Artesanos., Sociedad de Instrucción Primaria, Escuela Bruno Zavala Fredes, Colegio de Señoritas de Copiapó, Liceo de niñas de Copiapó, Cementerio Laico, Colonias y Roperos Escolares, Periódico ALAS., Participación en la creación de la Universidad de Atacama (UDA) a partir del instituto profesional conocido anteriormente como Sede Copiapó de la Universidad Técnica del Estado, Liceo Técnico Profesional al interior del Centro de Cumplimiento Penitenciario el cual el día de hoy lleva el nombre de Edwin Latorre Rivero, Centro femenino “Unión y Perseverancia” N° 3, Creación y administración de los Clanes “Los Chañares”, “Los Cristales” y “Tololo Pampa”, Club Copiapó, Creación de la Escuela de Música de Copiapó, actual Liceo de Música “Hugo Garrido Gaete”

CLUB COPIAPO

El Club Copiapó fue creado en primera instancia en 9 de septiembre de 1873, cuando se desarrollaban las obras de construcción en calle O’Higgins, donde funcionaba “Orden y Libertad” N° 3 en esa fecha. En ese periodo, el club obtuvo su personalidad jurídica, esto para que la Logia sea auspiciada por un ente externo a la Masonería y con cara a la sociedad, lo que duró hasta 1896 año en que el club cede el terreno a la Sociedad de Instrucción Primaria, razón por la cual el club desapareció momentáneamente.

En 1961 se comenzó la construcción de un nuevo templo e instalaciones en calle Chacabuco N° 780, donde funciona hoy el Club Copiapó, por lo cual se reactivó nuevamente la citada organización. En la oportunidad, se redactaron los estatutos y se obtuvo la personalidad jurídica con fecha 2 de enero de 1962.

En 1999, bajo la venerabilia de Edgardo Funes Soto, se decidió separar la administración del club de la administración de la autoridad logial, con el objeto de hacer más eficiente el manejo de ambas instituciones en sus respectivas tareas, objetivos y funciones; situación que dura hasta estos días.

LOS HOMBRES EN LA HISTORIA

Desde la llegada de los primeros masones a las logias de Valparaíso, Concepción, Copiapó y luego de la formación de las logias que dan origen a la Gran Logia de Chile, es innumerable la influencia de la masonería en el quehacer social, político y cultural de la sociedad chilena.

Los primeros extranjeros, pero poco a poco comienzan a surgir no sólo en Chile, los nombres y los hombres que materializan la obra de la Masonería.

Bernardo O’Higgins y sus anhelos de libertad e independencia, el esfuerzo de la llamada Constitución Liberal del año 28, citar a Manuel José Gandarillas y Manuel Rengifo.

La influencia en su época de la llamada “Sociedad de la Igualdad”, José Victorino Lastarria, Eusebio Lillo; Vicuña Mackenna y la legión de los igualitarios.

El papel de los masones en la denominada revuelta del 20 de abril de 1851 y el papel de Bilbao en esta época de nuestra incipiente historia republicana.

El Club de la Reforma, la libre expresión del pensamiento. Los Urmeneta, los Gallo, los Matta, los Alemparte y otros reformistas.

Lastarria y los positivistas; el homenaje, en esa época a la prensa independiente.

Los derechos civiles, los cementerios, Amunategui, Mac Iver, la Ley de Matrimonio Civil.
La Sociedad de Instrucción Primaria, el Estado Docente y la Libertad de Enseñanza, Preocupación del Partido Radical por la educación, la búsqueda de una instrucción primaria obligatoria.

ATACAMA Y SUS NOMBRES

En Atacama, también están los hombres que han construido todo un quehacer masónico a lo largo del tiempo. Han sumado esfuerzos, talentos y virtudes en pro del trabajo siempre discreto, silencioso pero constante de los masones en nuestro desértico territorio

Personajes destacados tales como Armando Ossa, Guillermo Rojas, Ángel Salas, Guillermo Arias, José Tomás Gallo, Salomón Balut, Santiago Matta, Luis Cabello, Aníbal Calderón, Vicente Rodríguez, Alejandro Latorre, Oscar Cortés, Marmaduke Grove, Tussel Caballero, Edgardo Funes, Manuel Magalhaes, José Lattus, Juan Iglesias, Alexis Latorre, Herver Traslaviña, Juan Latorre, Enrique Lillo, Hugo Garrido Núñez, Luis Álvarez, Luis Zapata Rojas, Hugo Garrido Gaete, Edwin Latorre, Guillermo Matta, Mario Maturana, Lorenzo Sotomayor, Gonzalo Garrido por nombrar solo algunos… a ellos se suman muchos otros que día a día emprenden su labor para alcanzar el anhelado deseo de una sociedad más justa, equitativa, desarrollada, tolerante y solidaria.

Resulta casi injusto no referirse a todos, pero lo trascendente es la suma del esfuerzo lo que finalmente sustenta toda esta rica tradición masónica.

Todos, unidos por los mismos ideales en una cadena de fraternidad, dan vida a “Orden y Libertad” N° 3, la Logia Madre, la cual hoy está de aniversario al cumplir su centésimo quincuagésimo octavo aniversario.

Hoy, los desafíos para la Masonería son otros, son otros los tiempos, son otras las personas, es otro el tiempo social.

Es una sociedad siempre desafiante, que requiere – tal y como siempre lo hizo – de la mirada masónica que pusiera luz sobre los temas morales, éticos, políticos, sociales, bajo la particular visión de la igualdad, la fraternidad y la libertad.

La Masonería, a través de sus hombres y su silenciosa y discreta obra, siempre han sido actores y no sólo observadores de su tiempo.

¡Buenaventura Orden y Libertad…Felicidades Logia Madre!.

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